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A medida que van transcurriendo los meses de embarazo, el feto avanza en su crecimiento en el interior del útero, que, cada vez más grande, acaba por presionar el estómago y desplazarlo hacia arriba. Esto, más las hormonas propias de este periodo, que interfieren con el funcionamiento del esfínter esofágico inferior, acaba por afectar a las digestiones, que se vuelven más lentas, y puede provocar, también, otros malestares como el ardor y el reflujo, ya que la debilidad del esfínter esofágico favorece el ascenso de los contenidos gástricos hacia el esófago. Por ello, es importante saber cómo podemos prevenir estas molestias y qué opciones existes para aliviar la indigestión en el embarazo.

Cómo prevenir la indigestión en el embarazo

¿Te preguntas cómo prevenir la indigestión en el embarazo? En nuestro día a día, podemos tener en cuenta algunas recomendaciones, sobre todo en cuanto a dieta y a estilo de vida, que nos pueden ayudar a evitar las molestias de la indigestión durante la etapa de embarazo (1):

  • Asegúrate de beber la cantidad suficiente de agua a lo largo del día y ten en cuenta que es mejor que lo hagas entre las comidas.
  • También es importante que mastiques muy bien los alimentos antes de tragarlos, lo que va a facilitar su digestión. Además, es recomendable que las comidas se desarrollen en un ambiente relajado, libre de estrés y de discusiones.
  • Mejor si comes, aproximadamente, a las mismas horas. Mantén una regularidad.
  • Entre los alimentos que escojas para componer tu menú es mejor que evites los ingredientes que te generen flatulencias o te resulten más grasos o pesados. Al contrario, dale prioridad a aquellos más ligeros.
  • Por otra parte, es recomendable que practiques alguna actividad física, lógicamente, adaptada a tus circunstancias, puedes consultar con tu matrona o ginecólogo. El ejercicio te ayudará a mantener un peso ideal durante estos meses y también es una buena forma de contribuir a reducir el estrés.
  • No olvides de descansar lo suficiente y esperar unas 2-3 horas antes de irte a la cama después de la cena. Igualmente, es aconsejable que comas pequeñas raciones varias veces al día antes que grandes cantidades de comida de una sola vez.

Qué comer cuando tienes indigestión embarazada

También es importante saber qué alimentos son los más adecuados para cuando sufrimos una indigestión o para intentar evitarla, si es que tenemos propensión a padecerla, pero ¿qué comer cuando tienes indigestión en el embarazo? En esta situación, conviene prescindir de los alimentos más ricos en grasas, de los que generan flatulencias o de los que están muy procesados.

Se aconseja aumentar el consumo de frutas y de verduras del tipo astringente, como la zanahoria. Respecto a las proteínas, la sugerencia es que te decantes por las carnes magras y los pescados blancos. En cuanto a la preparación de las comidas, es mucho mejor optar por alimentos a la plancha, horneados o por hacerlos al vapor antes que escoger preparaciones como las frituras, que pueden resultar indigestas (1).

En cualquier caso, come de todo con moderación, procura elegir, en la medida de lo posible, platos ligeros y bajos en grasas y no te olvides de beber la cantidad suficiente de líquidos a lo largo del día.

Qué tomar para la indigestión en el embarazo

Si, a pesar de seguir todas estas recomendaciones, sigues sufriendo de indigestión y malestar estomacal en el embarazo, puedes probar Gavinatura comprimidos, elaborado con ingredientes de origen 100% natural que, gracias a su triple acción, protege el estómago, neutraliza el ácido y previene la irritación estomacal, reforzando las defensas naturales de tu estómago. Gavinatura puede tomarse durante el embarazo y la lactancia si es necesario, siguiendo las indicaciones de un profesional sanitario. Consulta al pediatra antes de utilizar este producto en niños mayores de 6 años. Cumple con la normativa de productos sanitarios.

Cumple con la normativa de productos sanitarios. CPSP22057CAT

Fuentes:

(1) Alimentación del paciente dispépsico. Consejo nutricional. Montserrat Villaplana, publicado en Elsevier.

El contenido de este sitio web no es un consejo médico y está destinado únicamente a fines informativos.

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